La obra Silleteando, bajo la dirección y visión creativa de María Adelaida Mejía, se erige como uno de los proyectos más complejos y conmovedores realizados por Fundación Sirenaica. Tras una primera muestra en 2023, el montaje en 2024 significó un paso monumental para el coro IUVENTUS y Sirenaica, alcanzando una integración total de las artes escénicas y musicales. María Adelaida describe este logro como un proceso donde la danza, el teatro y la música se fundieron en una obra de una magnitud sin precedentes.
«Esta es la obra de mayor complejidad en la que las artes realmente se integraron», comenta la maestra. Para muchos de los jóvenes artistas, la experiencia fue una inmersión total, no solo en la tradición silletera, sino también en un proceso creativo exigente, que les permitió desarrollar personajes únicos, y al mismo tiempo, conectar profundamente con la esencia de una herencia cultural que forma parte del corazón de Medellín.

En el transcurso de un año, los actores fueron entrenados en danza, clave para la transformación visible en los cuerpos y la expresión de los jóvenes en escena. Esta evolución artística estuvo respaldada por un equipo interdisciplinario de maestros y creadores, que incluyó a la talentosa escenógrafa Valeria Alvarado Mejía, cuya experiencia y sensibilidad aportaron una magia única al montaje. Los poemas de Carlos Eduardo Pérez -corista de IUVENTUS-, cuidadosamente integrados a lo largo de la obra, se convirtieron en el hilo conductor que guió a la audiencia por los recovecos poéticos de la historia silletera.
La obra no se limitó a honrar el pasado. A través de personajes emblemáticos, como los silleteros vestidos como estatuas humanas, se rindió un homenaje a quienes han mantenido viva esta tradición, mientras que las nuevas generaciones de artistas y músicos aportaron su visión contemporánea. El vestuario, diseñado por Diana Echandía, añadió una capa adicional de profundidad, realzando la solemnidad y el simbolismo de la obra.
Sin embargo, no todo fue sencillo. María Adelaida relata las dificultades económicas que enfrentaron a lo largo del proceso. Aunque obtuvieron una beca significativa, el costo total de la producción fue mucho mayor. Las limitaciones financieras impidieron realizar una grabación profesional de video y audio, lo que habría permitido llevar la obra a otros escenarios y concursos. A pesar de estos obstáculos, Silleteando fue presentada en cuatro teatros de Medellín, con un elenco de casi 50 personas, demostrando que la pasión por el arte y la cultura puede superar incluso las barreras más desafiantes.
«Queremos que mucha más gente vea esta obra, no solo en Medellín, sino en otros lugares de Colombia e incluso en el exterior. Es una obra honesta, única, y es un homenaje a los silleteros, quienes merecen ser reconocidos como el patrimonio vivo que son».


Silleteando es una oda a la historia y al presente, una obra que, a través de la música, la poesía y la danza, teje un relato de resistencia, belleza y memoria. Aún con los desafíos económicos que enfrenta, su esencia permanece intacta: un tributo sincero a una tradición que sigue floreciendo en el corazón de Medellín.